Un sistema portal especial en el tallo de la hipófisis, formado por una fina red de vasos sanguíneos, regula tanto la supresión como la liberación de hormonas y otras sustancias mensajeras. Aquí, ocho aminoácidos esenciales, es decir, verdaderamente vitales, y algunos semiesenciales comparten ingeniosamente sus tareas. Como agonistas liberadores de hormonas, la mayoría participan directamente en la liberación de determinados factores de crecimiento. Otras, sin embargo, bloquean la liberación de estas sustancias mensajeras, por lo que también se denominan somatostatinas o estatinas del hipotálamo.
L-leucina se encuentra en alimentos como el pescado, la carne, las legumbres y los productos lácteos. Previene la degradación muscular tras el esfuerzo físico y contribuye a proporcionar más energía al organismo.
La L-ornitina se encuentra en alimentos como los productos lácteos, la carne, el pescado y los huevos. Puede promover la eficiencia energética durante las actividades deportivas y ayudar a mantener el equilibrio hormonal dentro de los límites normales. La L-ornitina interactúa con la arginina, a partir de la cual puede formarse.
L-isoleucina: Alimentos como la carne, el pescado, las verduras y las legumbres son ricos en este aminoácido esencial. Esta sustancia natural puede ayudar a mantener niveles normales de azúcar en sangre.
La L-valina se encuentra en las legumbres, los cereales, la carne, el pescado y los frutos secos. Tiene un efecto estimulante general y es necesaria para el metabolismo muscular, la reparación y el crecimiento del tejido muscular.
La L-tirosina se encuentra principalmente en alimentos como los cacahuetes, los guisantes, los huevos y los productos de soja. Puede favorecer la concentración y el estado de ánimo, ya que es el precursor de varios neurotransmisores y hormonas.
L-triptófano, importante precursor de la serotonina, la hormona de la felicidad, puede facilitar la digestión. Alimentos como los frutos secos, la carne, el queso y el cacao en polvo son ricos en este nutriente.
La L-arginina se encuentra en alimentos como la carne, los frutos secos y las legumbres. Las semillas de calabaza son especialmente ricas en esta sustancia natural. Es importante para la formación de óxido nítrico en el organismo. Este último puede ayudar a mantener el flujo sanguíneo normal al tejido muscular, al tiempo que permite el funcionamiento normal de los riñones.
Entre los alimentos ricos en L-lisina se encuentran los huevos, los productos lácteos, el pescado y la carne muscular. La función principal de este aminoácido esencial es garantizar que el organismo pueda producir suficiente carnitina para favorecer la quema de grasas y el mantenimiento de niveles normales de colesterol LDL. Al mismo tiempo, contribuye al funcionamiento normal del tejido conjuntivo.
La L-metionina es otro aminoácido esencial que puede, entre otras cosas, favorecer el valor normal del pH de los fluidos corporales. Se encuentra en alimentos como el pescado, la carne, las verduras, el pan integral y el arroz.
Al igual que el triptófano, la L-fenilalanina es un precursor de neurotransmisores como la dopamina, la adrenalina y la noradrenalina. Alimentos como la ternera, las lentejas, los anacardos y la avena son especialmente ricos en este nutriente. La L-fenilalanina puede contribuir a levantar el ánimo en general.
La L-treonina es un aminoácido poco conocido pero esencial. Se encuentra en alimentos como la ternera y el pollo, las nueces, la harina integral y los guisantes. Es necesaria para la síntesis de los aminoácidos glicina y serina, esenciales para la producción de colágeno, elastina y tejido muscular. Así pues, la treonina contribuye a mantener fuertes y elásticos los tejidos conjuntivos y los músculos del organismo.
L-histidina: Se encuentra en alimentos como el atún y el salmón, la carne en filetes y el queso, pero también en la soja, los cacahuetes y el germen de trigo. La L-histidina tiene propiedades protectoras de las células y puede contribuir a la excreción de metales pesados. También puede contribuir al buen funcionamiento del sistema inmunitario.
La piperina, extracto de la pimienta negra, puede influir positivamente en la biodisponibilidad de diversos micronutrientes.
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