La mayoría de nosotros conocemos a alguien, ya sea un amigo, un abuelo, un padre u otro familiar, que toma medicación para la hipertensión, o tensión arterial alta. La hipertensión no sólo es frecuente en el mundo occidental, sino que el riesgo de padecerla aumenta con la edad. Al mismo tiempo, muchas personas descubren que también tienen problemas para dormir a medida que envejecen, una preocupación a menudo causada por la ralentización de la producción de melatonina relacionada con la edad. ¿Podrían estar relacionados? Nuevas investigaciones sugieren que podría existir una relación entre la melatonina y la tensión arterial.
La salud cardiovascular y el envejecimiento
No es de extrañar que nuestro cuerpo cambie a medida que envejecemos, y que los cambios sean más pronunciados en el interior que en el exterior. Nuestros vasos sanguíneos se vuelven menos flexibles, lo que allana el camino a la hipertensión y a diversas enfermedades cardiovasculares. Los cambios en el ritmo circadiano también contribuyen a la mala salud. Por ejemplo, nuestra tensión arterial sigue normalmente un ritmo predecible. A medida que envejecemos, la presión arterial se vuelve más variable e impredecible. En lugar de subir y bajar de forma predecible, tiende a ser más reactiva y a seguir señales externas en lugar de un reloj interno. Teniendo todo esto en cuenta, ¿podría existir una relación entre el ritmo circadiano, la melatonina y la tensión arterial?
Melatonina y presión arterial
En un estudio reciente, se hizo un seguimiento durante una semana de personas mayores que vivían en una comunidad de ancianos, prestando atención a su estilo de vida habitual y a los medicamentos que tomaban. Todos los participantes en el estudio padecían hipertensión de diversos grados y tenían una edad media de 80 años. A continuación, se indicó a los participantes que añadieran un suplemento de melatonina a su régimen diario. Tras sólo dos semanas, los resultados fueron sorprendentes. Tras añadir un suplemento de melatonina, la presión arterial disminuyó una media aproximada de ocho puntos, lo cual es significativo. Además, los que tomaron melatonina tuvieron menos variabilidad en la presión arterial y un ritmo de presión arterial más predecible, lo que sugiere que la melatonina puede ser útil en la protección contra algunos de los efectos negativos del envejecimiento en nuestros vasos sanguíneos. Esta novedosa investigación sobre la relación entre la melatonina y la tensión arterial sugiere que un suplemento diario de melatonina puede contribuir en gran medida a mantener sanos los vasos sanguíneos.
Dado que la presión arterial es un importante factor de riesgo de diversos problemas de salud graves y potencialmente mortales, estos hallazgos podrían tener efectos inmensos sobre la salud en general. Una presión arterial más baja es deseable en casi todos los casos y puede reducir el riesgo de complicaciones graves como infartos de miocardio. Además, la alta variabilidad de la presión arterial es un indicador importante del riesgo futuro de enfermedad. Las personas que presentan una variabilidad elevada corren el riesgo de padecer diversas enfermedades, como la insuficiencia renal crónica.
La magia de la melatonina
Liberada por la glándula pineal en respuesta a las señales del núcleo supraquiasmático (SCN, por sus siglas en inglés) del hipotálamo, la melatonina ha sido uno de los principales focos de investigación durante años debido a su papel esencial en el mantenimiento del ritmo circadiano y de un ciclo regular de sueño-vigilia. Los niveles de melatonina suelen disminuir con la edad, lo que provoca un sueño interrumpido o insuficiente en muchos adultos mayores. La reducción de melatonina relacionada con la edad puede ser parcialmente responsable de algunos de los efectos que asociamos con el envejecimiento. Por ejemplo, parte de la pérdida de memoria que asociamos con el envejecimiento puede deberse en realidad a la falta de sueño adecuado, ya que el sueño es el tiempo durante el cual consolidamos los recuerdos. Dado que el sueño es también el momento en que nuestras células rejuvenecen y se recuperan de los daños sufridos durante el día, algunos de los daños acumulados que asociamos con el envejecimiento pueden deberse en parte a la pérdida de melatonina relacionada con la edad.
La gente dice en broma que dormir es la mejor medicina. Sin embargo, las investigaciones indican que en realidad no es cosa de risa. Mantener un ritmo circadiano saludable, incluyendo la adición de un suplemento de melatonina si es necesario, puede ser una parte importante de la medicina preventiva. Es importante consultar al médico sobre cualquier suplemento o medicamento nuevo de venta libre. Cultivar un ciclo sano de sueño-vigilia es importante porque no dormimos sólo para soñar, sino también para completar procesos esenciales de reparación celular que nos mantienen sanos y felices.