La carencia de hierro es la deficiencia de nutrientes más común y afecta a 1.200 millones de personas en todo el mundo, de las que alrededor de 183.000 mueren cada año por falta de este nutriente. La carencia de hierro en las mujeres es especialmente frecuente debido a las elevadas necesidades de hierro del organismo femenino. Si se nota a menudo fatigada, con problemas de concentración o con otros síntomas vagos e insidiosos, es posible que simplemente necesite más hierro.
¿Por qué necesitamos hierro?
El hierro desempeña diversas funciones vitales en el cuerpo humano. En primer lugar, es uno de los componentes básicos de la hemoglobina, que transporta el oxígeno de la sangre desde los pulmones a las células que lo necesitan. El hierro también es importante en la fabricación de ATP, la molécula que las células utilizan como fuente de energía. Forma parte de muchas enzimas que intervienen en el crecimiento y el metabolismo. Las células del sistema inmunitario también utilizan el hierro para combatir las infecciones. Por último, el hierro se utiliza en las células musculares para almacenar oxígeno para los momentos en que se necesita más rápidamente de lo que el torrente sanguíneo puede suministrarlo.
Dado que nuestro cuerpo utiliza el hierro de muchas maneras, tenemos necesidades muy elevadas de este mineral. Cuando las personas no obtienen todo el hierro que necesitan, tienen problemas para convertir la energía de los alimentos en energía celular, no pueden transportar oxígeno a sus células y no pueden realizar una serie de funciones cruciales. En formas graves, la carencia de hierro puede ser incluso mortal.
Deficiencia de hierro en las mujeres: Un problema de salud frecuente
Hay tres formas básicas de que se produzca una carencia de hierro: o no se ingiere suficiente hierro, o no se absorbe eficazmente, o se pierde de alguna manera. Muchas personas no ingieren suficientes alimentos ricos en hierro, como la carne roja, los huevos, las gambas y la carne oscura de las aves. Además, se puede obtener hierro de verduras como las legumbres y las verduras de hoja verde, aunque este tipo de hierro debe consumirse con alimentos ácidos para que el organismo lo absorba.
Aunque se ingiera suficiente hierro, es posible que no se absorba lo suficiente. Las enfermedades inflamatorias del intestino pueden dificultar la absorción del hierro. Además, es posible que simplemente se esté perdiendo más hierro del que se ingiere de forma natural a través de la dieta. Las personas pierden hierro principalmente a través de las hemorragias, razón por la cual las personas con úlceras o parásitos intestinales tienen un alto riesgo de anemia. Esta es una razón muy importante por la que se observan altos niveles de deficiencia de hierro en las mujeres, especialmente en las que menstrúan o han tenido un hijo recientemente.
Síntomas de carencia de hierro
Los signos de la ferropenia pueden ser sutiles y, sin embargo, tener un enorme efecto en la calidad de la vida. El síntoma más común es la fatiga, porque las células no producen suficiente ATP y tampoco reciben niveles óptimos de oxígeno de la sangre. Además, la ferropenia en mujeres y hombres puede manifestarse de muchas otras formas, como por ejemplo
- mareos
- falta de aliento
- palpitaciones
- dolor de cabeza
- piel pálida
- manos y pies fríos
- antojos extraños de comida, especialmente de cosas que no son comida (pica)
- uñas quebradizas
- caída del cabello
- dolores musculares
- dificultad para concentrarse
- síndrome de las piernas inquietas
Cuando el organismo no dispone de los nutrientes necesarios para llevar a cabo todos los procesos celulares que el hierro favorece, los efectos se dejan sentir de diversas maneras. Muchas personas achacan los efectos de la falta de hierro a que no duermen lo suficiente, a que envejecen o a que tienen una agenda muy apretada, cuando en realidad lo que necesitan es ingerir más vitaminas y minerales.
Tratar la carencia de hierro de forma segura y natural
Si se cree que se padece una carencia de hierro, hay varias formas de aumentar rápidamente los niveles saludables de esta vitamina. Muchas personas simplemente añaden más alimentos ricos en hierro a su dieta y tienen cuidado de comer fuentes vegetarianas de hierro con un alimento ácido como el limón. Sin embargo, puede ser difícil obtener el hierro que se necesita sólo con la dieta, sobre todo para las mujeres en edad reproductiva y los niños pequeños que crecen rápidamente. Para estas personas, la solución es tomar un suplemento de hierro o un multivitamínico con su dosis diaria de hierro.
Consumir suficiente hierro es crucial para gozar de buena salud. Sin embargo, la carencia de hierro en mujeres y niños es, por desgracia, demasiado común. Aunque en el mundo moderno puede resultar difícil obtener todo el hierro que se necesita para mantener una salud óptima, un complejo multivitamínico bien equilibrado garantiza que siempre se esté cubierto.