Coral Calcium®

Los minerales influyen en casi todos los procesos bioquímicos del organismo. Muchos minerales se eliminan de los suelos cultivables, por lo que las carencias son casi inevitables. A menudo se manifiestan de forma enmascarada, por lo que no es fácil encontrar la causa.

¿Qué son los minerales coralinos? Los animales marinos ingieren minerales marinos iónicos y los excretan en forma de corales. Por lo tanto, los minerales de los corales son orgánicos, o formados por un animal. Los minerales inorgánicos sólo pueden ser utilizados por el organismo de forma limitada y con gran dificultad.

Los corales son ricos en calcio, por lo que constituyen una excelente fuente de este mineral, ya que el calcio que contienen se absorbe fácilmente y no provoca estreñimiento, como puede ocurrir cuando se toman otros tipos de suplementos de calcio. Todos los demás oligoelementos/minerales contenidos en los corales son también orgánicos y, por tanto, muy biodisponibles.

Las enzimas, las células nerviosas y casi todos los procesos bioquímicos necesitan minerales para funcionar correctamente. Los minerales de coral pueden tener un efecto positivo en diversos órganos, como el corazón, la piel, los músculos, las articulaciones y los riñones, y ayudan a conciliar el sueño y a mantener los niveles de azúcar en sangre dentro de los valores normales.

Cuando el organismo absorbe y asimila correctamente los minerales de coral, se compensan las carencias específicas de oligoelementos y se reponen las reservas minerales del organismo. El pH del organismo puede volver a su estado alcalino natural. Esto puede tener un efecto favorable sobre el sistema inmunitario y el bienestar general.

Otros efectos positivos:

Huesos y dientes: El calcio es necesario para tener huesos y dientes normales y puede contribuir al metabolismo energético normal. El calcio es el elemento más abundante en el cuerpo humano; el 99% está ligado a los huesos y dientes, ya que éstos están formados predominantemente por calcio. La absorción del calcio depende principalmente de la vitamina D.

Músculos y sistema nervioso: Las contracciones musculares y la transmisión de estímulos en las células nerviosas están reguladas por el calcio. Así pues, el calcio puede contribuir al funcionamiento normal de los músculos.

El calcio también puede contribuir a la coagulación normal de la sangre, así como a la función normal de las enzimas digestivas y la neurotransmisión. El calcio también interviene en el proceso de división y especialización celular.

La vitamina D contribuye a la absorción/utilización normal del calcio y el fósforo y a los niveles normales de calcio en sangre. El calcio y la vitamina D son necesarios para el crecimiento y desarrollo normales de los huesos en los niños. Además, la vitamina D contribuye al funcionamiento normal del sistema inmunitario y a la división celular.